Con una política de apertura, acceso preferencial y entorno comercial atractivo, Vietnam ha atraído una gran cantidad de proyectos de inversión extranjera directa (IED) a lo largo de los años.
Mientras el mundo aún enfrenta severas afectaciones por la pandemia de la COVID-19, las actividades de negocios de los inversores en Vietnam siguen activas y efectivas. Las fuentes de capitales de IED se han convertido en una fuerza motriz para el desarrollo económico y la integración económica internacional de Vietnam.
Con las ventajas competitivas en términos del ambiente de inversión abierto, política estable, macroeconomía y abundantes recursos humanos a bajo costo, Vietnam figura entre los destinos más atractivos y confiables para los negociantes extranjeros.
Al reconocer el significado y el papel de las fuentes de capital de IED, el Gobierno vietnamita emitió numerosas políticas e implementó muchas soluciones para crear un entorno de inversión atractivo y seguro, sobre todo la Ley de Inversión Extranjera de 1987 y recientemente la Resolución 50-NQ/TW del 20 de agosto de 2019 del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista sobre orientaciones con vistas a perfeccionar instituciones, políticas y mejorar la calidad y eficiencia de la cooperación en materia de inversión extranjera hasta 2030.
Junto a esto, las empresas han mejorado constantemente en términos de recursos humanos y líneas de producción en los últimos años para atraer aún más inversores.
Gracias a tales esfuerzos, a lo largo de los años, el capital de IED en Vietnam ha crecido continuamente, sobre todo tras la participación del país en una serie de los Tratados de Libre Comercio (TLC) bilaterales y multilaterales.
En la etapa 2015-2019, el capital total de IED registrado en el país indochino mostró un incremento fuerte y continuo, desde 22,7 mil millones en 2015 a 38,95 mil millones de dólares en 2019. Por otro lado, el capital de IED realizado en Vietnam también aumentó, desde unos 14,5 mil millones de dólares en 2015 a unos 20,38 mil millones de dólares en 2019, mientras el número de los proyectos de inversión con nuevo registro dio señales positivas, desde mil 843 en 2015 a tres mil 883 en 2019.
Incluso cuando el mundo se vio muy afectado por la epidemia, las actividades de los inversores en Vietnam, aunque disminuyeron, siguieron siendo activas y efectivas (mientras que el IED en otros estados en la región se redujo).
En 2020, Vietnam figuró en la lista de los 20 principales países con mayor cantidad de IED en el mundo, con un valor registrado de 28,53 mil millones de dólares, cifra que aumentó a unos 31,15 mil millones de dólares en 2021 y unos 27,72 mil millones de dólares en 2022.
A pesar de los impactos negativos de la COVID-19, el capital de IED realizado sufrió disminuciones de 2 y 1,2 por ciento en 2020 y 2021, respectivamente, y luego registró una subida de 13,5 por ciento en 2022.
Los inversores extranjeros han invertido en 19 industrias de un total de 21 sectores económicos nacionales. En cuanto a la cantidad de nuevos proyectos, las industrias mayorista y minorista, manufactureras y de procesamiento y las actividades profesionales de ciencia y tecnología atrajeron la mayoría de los proyectos.
En 2022, un total de 108 países y territorios han invertido en Vietnam; entre ellos, Singapur encabezó la lista con un valor registrado de 6,46 mil millones de dólares, ocupando así el 23,3 por ciento del total, seguidos por Corea del Sur (4,88 mil millones de dólares) y Japón (4,78 mil millones de dólares).
Las cifras anteriores muestran que, a pesar de los efectos adversos de la pandemia de la COVID-19, los inversionistas foráneos aún confían en la economía y el entorno de inversión de la nación indochina.
Según Brook Taylor, director general de la Compañía de Gestión de Capital VinaCapital, los factores fundamentales que impulsan el ritmo de crecimiento económico de Vietnam se han mantenido sin cambios. Vietnam sigue siendo una economía abierta con gran potencial de exportación, lo cual luce atractivo para las fuentes de IED, especialmente en los campos de producción a servicio de la exportación. Además, la demanda interna también ha aumentado y, por tales razones, Vietnam se está transformando en el camino del desarrollo como una de las principales economías asiáticas, incluidas Japón y Corea del Sur.
Los datos del Ministerio de Planificación e Inversión demuestran que el capital de IED promedio realizado en Vietnam en el período 2016-2019 representó más de 23 por ciento del total de inversión realizado de toda la sociedad.
La proporción promedio del Producto Interno Bruto (PIB) del sector con capital de IED en la etapa representó el 19,8 por ciento del PIB total de toda la economía; atrayendo a unos cinco millones de trabajadores y generando el mayor ingreso al ocupar más de 42 por ciento de todo el sector empresarial.
El crecimiento del capital de IED no solo crea muchas condiciones favorables para que Vietnam acelere el tiempo de expansión del mercado internacional, sino que también ayuda a mejorar muchos aspectos en las actividades comerciales y reducir la carga de capital para varios proyectos grandes.
Además, la atracción y uso de capital de IED contribuye a promover la transformación y reestructuración económica, renovar el modelo de crecimiento y mejorar la competitividad del país, impulsar la reforma institucional, las políticas legales, el entorno de negocios y desarrollar una economía de mercado integral, moderna e integrada.
De acuerdo con el Ministerio de Planificación e Inversión, la política de apertura abierta de Vietnam en materias de IED y comercio hasta la fecha ha ayudado a promover la integración del país sudesteasiático en la economía global, su participación en la red de producción regional y la diversificación de las exportaciones de los bienes. Al mismo tiempo, ha creado una gran cantidad de puestos de trabajo para poblaciones jóvenes, mejorando así los ingresos del Estado y la balanza de pagos nacional.
Además de los beneficios directos, la realidad también muestra que el capital de IED ha comenzado a generar importantes frutos indirectos, sobre todo presentación de las nuevas tecnologías, estándares internacionales sobre la producción y los servicios, desarrollo de habilidades a la fuerza laboral y creación de empleos en las áreas de la industria auxiliar y servicios.
De hecho, luego de 35 años de la apertura oficial para atraer la IED, la fuente de capital de IED ha jugado y ha seguido desempeñando un papel muy importante en el desarrollo socioeconómico, convirtiéndose en una fuerza impulsora clave para el desarrollo e integración económica internacional de Vietnam./.