Vietnam avanza veloz     en desarrollo de vacuna contra el COVID-19

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Cuando todo Vietnam se apresura a contener la propagación de la pandemia de COVID-19, los científicos corren día y noche para encontrar una vacuna contra la enfermedad, un “arma” para ayudar a la humanidad a combatir ese mal y también la más duradera y eficiente medida antiepidémica.

El 26 de febrero de 2021, el Instituto de Biomedicina y Farmacia Militar, de la Universidad de Medicina Militar de Vietnam, llevó a cabo la segunda fase del ensayo clínico en humanos de la vacuna Nano Covax, desarrollada por la empresa Nanogen.

El plan de estudiar la vacuna contra el COVID-19 vino por sorpresa al grupo de expertos de la empresa VABIOTECH, del Ministerio de Salud, hace un año, cuando se estalló la epidemia. En ese momento, los científicos se encontraban en el Reino Unido para trabajar sobre diferentes tipos de vacunas contra la rabia y la gripe. En enero de 2020, Vietnam registró los primeros casos confirmados del coronavirus. Ante esa situación, los investigadores de VABIOTECH decidieron cambiar de dirección para cooperar con sus colegas de la Universidad británica de Bristol en el desarrollo de un medicamento contra el COVID-19, basado en la tecnología de vector viral. Se trata de una decisión audaz porque en ese momento, el mundo apenas pensaba en el estudio de la vacuna contra el COVID-19 y nadie esperaba que el fenómeno se convirtiera en una pandemia. Posteriormente, el Reino Unido registró fuertes brotes de la infección y tuvo que aplicar las medidas de distanciamiento social. El equipo de investigación se vio obligado a acelerar sus estudios, antes de regresar a Vietnam.

Los expertos de VABIOTECH se esfuerzan por desarrollar la vacuna contra el COVID-19 (Foto: VNA)
Los expertos de VABIOTECH se esfuerzan por desarrollar la vacuna contra el COVID-19 (Foto: VNA)

Mac Van Trong, uno de los dos expertos de VABIOTECH en la Universidad de Bristol, repasó las arduas jornadas de trabajo de su equipo con la aspiración de desarrollar un producto completo, y dijo: “La mayor dificultad fue cuando Europa aplicó las restricciones y todas las actividades de investigación tuvieron que detenerse. Nuestro equipo aprovechó cada minuto y cada hora, y no descansamos hasta completar el plan trazado”. El grupo aprovechó al máximo su tiempo en el país europeo para realizar los estudios. Esperaron hasta el momento del cierre de la vía aérea a fines de marzo de 2020 para elegir el último vuelo comercial de regreso a la Patria. Tras cumplir 14 días de cuarentena, los investigadores volvieron de forma urgente a sus trabajos para compensar el tiempo perdido, con una intensidad casi el doble de una jornada laboral regular.

Los expertos realizan los  análisis en el laboratorio (Foto: VNA)
Los expertos realizan los  análisis en el laboratorio (Foto: VNA)

El laboratorio de VABIOTECH se convirtió en ese periodo en una “habitación de cuarentena para los estudios” de los científicos que regresaban del Reino Unido. Gracias a esa medida, solo un mes después, se completó el desarrollo de una vacuna candidata, que se sometió a las pruebas preclínicas en animales.

“Los ensayos en animales constituyeron una base decisiva para evaluar los resultados que los expertos adquirieron en los laboratorios extranjeros”, reveló Do Tuan Dat, presidente de VABIOTECH. Los científicos de VABIOTECH enfrentaron numerosos desafíos causados por la pandemia, señaló. “La mayor dificultad para los investigadores radica en el distanciamiento social. El suministro de materias primas para desarrollo de las vacunas enfrenta limitaciones porque Vietnam todavía depende de las importaciones, mientras que otros países también sufren del paro de las actividades de producción y transporte”, dijo Tuan Dat, al agregar que su personal siempre busca las soluciones para obtener los recursos de manera proactiva.

El problema de los científicos es desarrollar una vacuna efectiva, que se pueda producir con rapidez y a gran escala, mientras que la tecnología es todavía bastante nueva para ellos, señaló.

Los científicos vietnamitas desafían numerosos desafíos en el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 (Foto:VNA)
Los científicos vietnamitas desafían numerosos desafíos en el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 (Foto:VNA)

Por otro lado, la empresa Nanogen también se encuentra entre las unidades que comenzó a investigar la vacuna contra el COVID-19 desde los primeros días de la aparición del virus SARS-CoV-2 en la ciudad china de Wuhan. Los expertos de la firma siguieron de cerca la evolución e información relacionada con la nueva cepa del coronavirus. Ho Nhan, director general de Nanogen, subrayó que el 15 de mayo del año pasado, el Ministerio de Ciencia y Tecnología asignó a su empresa la tarea de analizar el proceso de fabricación de la vacuna contra el COVID-19, y solo una semana después, el proyecto fue aprobado.

Para junio de 2020, Nanogen presentó una vacuna para las pruebas en animales que fue evaluada como segura. La vacuna Nano Covax también fue aprobada por el Consejo Nacional de Ética y entró oficialmente en la primera fase de ensayos clínicos en humanos el 17 de diciembre de 2020.

El viceprimer ministro Vu Duc Dam visita y alienta a los voluntarios y al personal de la Universidad de Medicina Militar en la segunda fase de ensayos clínicos de la vacuna Nano Covax contra el COVID-19 (Foto: VNA)
El viceprimer ministro Vu Duc Dam visita y alienta a los voluntarios y al personal de la Universidad de Medicina Militar en la segunda fase de ensayos clínicos de la vacuna Nano Covax contra el COVID-19 (Foto: VNA)

Con el esfuerzo de los expertos, Nano Covax figura en el top de las vacunas contra el COVID-19 desarrolladas en el país. Hasta la fecha, se completó la primera fase de ensayo clínico del anticuerpo, en la que 60 voluntarios recibieron 120 inyecciones con tres dosis diferentes. Su nivel de efectividad alcanzó el 90 por ciento.

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Do Minh Si, director de investigación y desarrollo de Nanogen, destacó que la compañía cuenta con 10 años de experiencia en el estudio de vacunas, por lo que solo necesita entre cinco y seis meses para desarrollar un producto candidato para los ensayos preclínicos y clínicos.

Según el experto, el mayor desafío para los científicos es la cuestión del tiempo, además de la constante evolución del virus SARS-CoV-2.

Con la vacuna de Nanogen, los expertos vietnamitas demostraron una vez más la inteligencia del país indochino en la arena internacional. Sin embargo, los investigadores enfrentaron algunas dificultades relacionadas con los procedimientos administrativos. Además, cabe destacar también que Vietnam no posee un laboratorio lo suficientemente grande para probar las vacunas en monos y ratas, y tampoco puede enviar muestras a laboratorios en el extranjero a causa de las políticas de restricción debido a la epidemia. En consecuencia, Nanogen coordinó con el Instituto Nacional de Higiene y Epidemiología para aprovechar una sala de bioseguridad para cultivar el virus y realizar pruebas en hámsteres, de acuerdo con las condiciones del laboratorio. Según Do Tuan Dat, los países que estudian la vacuna contra el COVID-19 aceptan destinar una gran inversión, independientemente de los resultados de la investigación, sin embargo, en el caso de Vietnam, con sus condiciones limitadas, no se puede arriesgar una suma de capital tan grande”.

“Cuando desarrollamos la vacuna con pocos recursos, no nos atrevemos a pensar en tomar la iniciativa, pero siempre tratamos de garantizar el acceso a diferentes tecnologías”, dijo.

La producción también enfrentará dificultades, puesto que ese proceso se asocia con una gran inversión, y requiere de la rapidez y eficiencia, continuó, al agregar que, “cuando hacemos una investigación, tenemos que preparar las fábricas, el personal y las instalaciones para poder comenzar la producción lo antes posible”.

Según los expertos, el hecho de que Vietnam haya podido desarrollar las vacunas contra el COVID-19 durante un corto período de tiempo no constituye una sorpresa, puesto que el país posee mucha experiencia en la investigación y producción de vacunas. El país indochino produjo por sí solo numerosas vacunas bajo el Programa Ampliado de Inmunización, lo que constituye una base para la fabricación rápida y efectiva del medicamento contra el coronavirus.

Voluntarios se registran a la segunda fase de ensayos clínicos de la vacuna Nano Covax contra el COVID-19 (Foto: VNA)
Voluntarios se registran a la segunda fase de ensayos clínicos de la vacuna Nano Covax contra el COVID-19 (Foto: VNA)

Actualmente, cuatro fabricantes vietnamitas se empeñan en estudiar las vacunas contra el COVID-19 con diferentes direcciones tecnológicas. Los expertos evaluaron que pese a la diferencia, esas tecnologías son todas avanzadas y el progreso de la investigación corre al tiempo con el plan propuesto. La mayoría de los productos hechos en Vietnam es capaz de responder a las nuevas cepas del virus, aunque todavía requieren de monitoreo y evaluación.

Pham Van Tac, director del Departamento de Ciencia, Tecnología y Capacitación, del Ministerio de Salud, enfatizó que Vietnam ha puesto su nombre en el mapa mundial en la lucha contra la pandemia. El control y la prevención contra el COVID-19 se han convertido en una meta para la nación del Sudeste Asiático y el orbe. Además, Vietnam se enorgullece de ser una de las pocas naciones en alcanzar avances en el desarrollo de la vacuna contra ese mal./.

Científicos de VABIOTECH en el laboratorio (Foto: VNA)
Científicos de VABIOTECH en el laboratorio (Foto: VNA)